¿Qué es la felicidad?
La felicidad es un concepto resbaladizo, no hay una definición clara de ella, actualmente el concepto de felicidad es más una teoría que un recetario sobre como alcanzarla (Hefferon y Boniwell, 2011). La psicología positiva ha dividido el problema de estudiarla en conceptos más sencillos y más asequibles, como bienestar o calidad de vida y, entre otras cosas, se ha centrado en investigar las emociones positivas, que lógicamente tienen que estar ligadas a la felicidad. Así Seligman (2002) en su libro Authentic Happiness se refiere a la vida placentera que es una vida que maximiza las emociones positivas y minimiza el dolor y las emociones negativas, como parte de la felicidad.
Seligman las estudia en tres periodos de tiempo: en el pasado, de donde surgen alegría, satisfacción y serenidad; en el presente, en el que surgen los placeres corporales, que son momentáneos y requieren aprendizaje y educación; y las emociones referidas al futuro entre las que están el optimismo, la esperanza y la fe.
Pero Seligman no se queda en el aspecto temporal de la felicidad, nos enseña que existen tres tipos de felicidad:
La felicidad hedonista, es decir, la vida placentera, unida a los goces de la vida. Las emociones positivas son centrales en esta visión de la felicidad, que ve el placer como una de sus fuentes. Entre las emociones positivas que se generan en la búsqueda del placer cita Sligman: la alegría, la gratitud, la serenidad, la esperanza, el orgullo, la diversión, la inspiración, la sorpresa y el amor.
La felicidad que sentimos cuando estamos poniendo en marcha nuestras capacidades, comprometidos en una tarea que nos absorbe. Sentimos entonces que el tiempo se detiene, nos sentimos fluir. La sensación de fluir en la tarea hace que el tiempo transcurra veloz y las emociones positivas surgen cuando acabamos la tarea.
La felicidad de hacer algo que da sentido a nuestra vida. Se trata de hacer algo por alguien o por algo que consideramos que tiene un valor superior a nosotros mismos (Dios, la humanidad, los hijos, un ideal, un partido, etc.). Puede haber sufrimiento en lo que hacemos y las emociones positivas surgen cuando valoramos lo que hemos hecho o lo que estamos haciendo, que estará muy por encima de lo que hemos sufrido.
Para estudiar la felicidad la psicología se centra en el estudio de las emociones positivas como medio de alcanzar la felicidad y considera que surgen asociadas al placer y también al compromiso con nuestros valores y a dar sentido a nuestra vida.
En resumen, para estudiar la felicidad la psicología positiva se centra en el estudio de las emociones positivas como medio de alcanzar la felicidad y considera que surgen asociadas al placer y también al compromiso con nuestros valores y a dar sentido a nuestra vida.